viernes, 26 de noviembre de 2010

Alrededor de una estanque redondo, donde crecen peces de colores y nenúfares blancos y rosas, se crea con ladrillos de canto -un estilo muy andaluz de colocarlos- unos espacios que se llenan con macizos de arrayanes. En verano darán una florecilla rosa y siempre estarán verdes. Cuando les pasas la mano por encima o sopla la brisa, desprenden un olor suave muy rico. Como admiten muy bien la poda, suelen utilizarse para hacer topiaria -el arte de esculpir la vegetación-. Al ser menos caros que el boj y de crecimiento mayor, son muy populares en los jardínes.
Su mantenimiento es fácil y el resultado espectacular, como puede verse en esta foto.

lunes, 22 de noviembre de 2010

La mejor y más fácil Tarta de Manzanas Reinetas de León

Tarta de manzanas fácil y exquisita
Ingredientes:
- 12 manzanas Reinetas de León.
- 1 yogur desnatado natural
- medio vaso de azúcar morena
- medio vaso de aceite de oliva virgen superior
- 3 huevos de gallina de corral
- 2 cucharadas soperas de Maizena
- 2 cucharadas soperas de coco
Canela para decorar y darle el toque final con granadas y unas hojas de hierbabuena.



Las manzanas reineta y los huevos frescos de gallina de corral, son fundamentales en esta receta.
Lo primero es trocear 12 manzanas, yo utilizo las reinetas de Donillas, una aldea leonesa y los trozos tienen que ser pequeños. Reservo 3 manzanas que las corto fileteadas y finitas. 
Unto con mantequilla un molde y coloco una base de manzanas fileteadas, espolvoreo un poco de azúcar moreno y lo meto en el horno a 200 º, hasta que toman un ligero tono beig. Cuando eso ocurre, saco el molde del horno para añadirle por encima la masa.
En el vaso de la batidora -yo utilizo la Hamilton de toda la vida con seis velocidades- pongo primero un yogur. Algunas veces, si no lo tengo desnatado natural, le pongo el que tenga de fresas, pera o plátano y utilizo el envase para calcular el aceite de oliva-medio bote- y el azúcar -medio bote-. Luego, añado 3 huevos, los trozos de manzana. Dos cucharadas soperas de maizena y dos cucharradas de coco rallado. Lo bato bien, comienzo a 4 de velocidad y acabo en el 6.
Verter en el molde que hemos forrado con manzanas y terminar con más manzanas fileteadas por encima y al horno a 200º aprx 25'. Al sacarlo se le puede espolvorear discretamente por encima un poquito de canela y decorar con granadas y ramas de canela.
Éxito seguro

sábado, 20 de noviembre de 2010

LOS CAQUIS, ÁRBOL Y FRUTO


El caqui ahora es un árbol alto, como de unos tres metros, pero cuando lo compramos no pasaba de un palo de 20 centímetros. Tardó en crecer y en hacerse al lugar. A los tres años de haberlo plantado el caqui parece otro.
Está en una esquina del jardín, con orientación Sur y protegido por el seto de arizónicas. Es una zona humeda porque está al pie del estanque. El estanque es artificial y por tanto el suelo no es humedo, pero en verano, yo creo que el caqui agradece la humedad que desprende el agua del estanque. La flor, lástima que no tenga fotos, es extraña. No es bonita es original y grande. Curiosamente no tiene los pétalos convencionales. Tarda mucho en formar el fruto y muchísimo en madurar. Ahora en otoño el caqui va tomando ese color naranja tan característico pero está duro como una piedra.
Hasta que no se pueda hundir un dedo en él, no estará listo para ser comido. El problema es que los pájaros no dan tregua, esos odiosos pájaros negros con el pico naranja, en cuanto lo ven cambiar de color ya están picoteando su superficie y fastidiando todos los frutos.
Al parecer, los caquis contienen más cantidad de vitamina C que las naranjas y si lo comes, cuando aún no está del todo maduro, te deja una sensación aspera en la boca, es muy curioso.
Según avance el frío, perderá las hojas y se quedará como un palo con ramas seco para volver a brotar en primavera. Nosotros no lo hemos podado y no sé si soportará bien una poda.

sábado, 13 de noviembre de 2010

PEONIAS, LA REINA DE LA CASA

LAS PEONÍAS DURAN POCO, PERO EL TIEMPO QUE ESTÁN EN FLOR SON MAJESTUOSAS


Ahora están de moda en España, pero han pasado siempre desapercibidas, quizás, por desconocimiento de su existencia. Sin embargo, todos los grandes pintores como Juan de Arellano, en el pasado, o Cristina Duclós en el presente, la han hecho protagonista de sus cuadros.
Aunque no todas huelen, las que sí conservan este particuliar estimulo de atracción para que los insectos las polinicen, destilan una fragancia, suave, elegante y original. Como ocurre en todo el reino vegetal, hay multitud de variedades, las hay arboreas -de porte alto- y las hay arbustivas -más bajas, como matas-, también las hay con flores simples de cinco o seis pétalos sencillos, como una anémona bien abierta o como si fueran rosas antiguas, mis preferidas como las de la foto-. Antes de eclosionar, los capullos nacen de unas varas alargadas y son gordos hasta reventar, poco a poco van anunciando el color de la flor y cuando abren lo hacen en tropel, sus pétalos se estiran formando una flor abigarrada bellísima.
No dura mucho abierta, enseguida sus pétalos se caen todos juntos y forman un manto de color en la tierra. También es una belleza verlos morir lentamente formando una película de abono para el próximo año. Después la planta mantendrá su espesor verde y con el final del verano desaparecerá, como comida por la tierra. Lo que hace es entrar en un letargo y multiplicarse. Su rizoma va tomando terreno y así va extendiendose y multiplicandose.
A la peonía le gusta el sol moderado, no el del verano directo, agradece una tierra bien abonada con tierra ácida y la humedad. Es perfecta formando setos y como flor cortada está dentro de la gama alta y por tanto resulta cara. También la planta es cara aunque se puede comprar el rizoma -como hacemos con los bulbos de estación- y plantarlo en tierra, de esta forma es más asequible.

ACER PALMATUM, ELEGANTE Y JAPONÉS


El Acer Palmatum, es un árbol de porte mediano e incluso, tirando a pequeño. Su característica hoja pequeña, plana y puntas, le da una elegancia especial. Se utiliza especialmente para los jardínes japoneses porque juegan con las diferentes alturas y gamas de colores de hoja, que tienen las diferentes variedades de Acer.
Su crecimiento es lento y es de hoja caduca. En otoño, cuando comienzan los fríos, su hoja lentamente va cambiando de color. Pasa del verde a todas las tonalidades de amarillos, naranjas y rojos posibles. Hasta que finalmente tira la hoja y se queda como seco, con sus ramas extendidas. Es su forma de protegerse del frío.
No le gustan las podas y es mejor dirigirlo por métodos naturales, como colgarle peso de las ramas para que caigan o ponerle palos que lo sujeten y formen. Todo, mejor que una poda.
Es un árbol bellísimo por elegante, por original y por etéreo es como si no pesase. Suele ser caro y mucha gente lo cultiva en grandes macetas. Este concretamente, lo tengo en un contenedor de plástico, al que voy suministrando substrato rico para alimentarlo. Ahora, lo tengo colocado en el estanque de los nenúfares protegido por un ilex, un evonimus y un gran pruno. Con esto ha tenido humedad en verano y le ha protegido de lo rayos directos del sol del verano madrileño. Posiblemente, si este año es muy frío, lo meteré en el invernadero pero hasta ahora, ha pasado los seis inviernos que lleva conmigo a la intemperie. Vino de Londres, lo compré en un mercadillo callejero que ponen en la ciudad los domingos por la mañana.